martes, 26 de enero de 2010

TIJERAS

Tengo unas tijeras de cocina azules con el filo muy cortante. Da gusto. La verdad es que ahora estoy por enmarcarlas o guardarlas en un cofrecito como los de las cenizas de los difuntos que luciría muy bien en la vitrina de mi salón. Y es que resulta que no sólo son estupendas para cortar la cola de las pescadillas. Con ellas he conseguido romper definitivamente con una parte de mi pasado, rasgar (literal y metafóricamente) ciertas normas morales que me hicieron mucho daño, tijeretear complejos y recuerdos feos, de los que no es necesario guardar.
Unas tijeras, un símbolo, un grito de guerra.
Qué gracia que algo tan pequeño, tan barato, tan prosaico, tan intrascendente, tan poco espiritual, de repente sea para mí el símbolo de una nueva vida. Gracias C.

2 comentarios:

  1. Por favor, me podría indicar donde compró esas tiejeras? Modelo y precio?? Necesito comprar unas cuanto antes. Enhorabuena por el blog!

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  2. En una casita pequeña que se llama "A otra cosa mariposa". Está genial porque no venden nada. Tú vas con tus tijeras de casa, o con tu mechero, navajita, punzón, rotulador gordo (de color negro a poder ser para que tache bien)... y sólo entrando allí cobra vida.Y después todo va corrido. Te lo recomiendo.
    Gracias por el comentario, qué ilusión.

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