Esta mañana antes del cole mis hijas se han dedicado a sacar los álbumes de fotos de la librería. Sin tiempo ni fuerzas para obligarles a recoger, lo hemos dejado todo por el suelo. Al volver de trabajar he empezado a colocar cada cosa en su sitio. Además de los álbumes habían sacado un librito de Benedetti, qué cultas mis niñas, y lo habían dejado abierto justamente por esta página
ES TAN POCO
Lo que conoces
es tan poco
lo que conoces de mí
lo que conoces
son mis nubes
son mis silencios
son mis gestos
lo que conoces
es la tristeza
de mi casa vista desde afuera
son los postigos de mi tristeza
el llamador de mi tristeza
Pero no sabes nada
a lo sumo
piensas a veces
que es tan poco
lo que conozco de ti
o sea tus nubes
o tus silencios
o tus gestos
lo que conozco es la tristeza
de tu casa vista desde afuera
son los postigos de tu tristeza
el llamador de tu tristeza.
Pero no llamas.
Pero no llamo.
"Pero no llamas. Pero no llamo."
ResponderEliminarLástima que Benedetti ya no esté, si no le preguntaría si esos dos llegaron a llamarse algún día.
¿Cuantas cosas dejamos de hacer por prejuicios, orgullos, indecisiones...? ¿Y qué ocurriría si...nos decidieramos a llamar? ¿Qué nos estamos perdiendo?
Un saludico
¡Benedetti! ¡Grandioso! Chicas, he de deciros que yo lo hice. Llamar. Y bueno, finalmente la cosa no salió bien, pero no me arrepiento. Solo conocí sus nubes, sus silencios, y una docena de gestos. No me dejó conocer más. Pero llamé, y solo por eso, ¡mereció la pena!
ResponderEliminarYo creo que nosotras somos más valientes, y seguro que vale la pena, por lo menos para no quedarnos con la duda. Y que piensen lo que quieran. Saludos de viernes a las dos.
ResponderEliminardicen los poetas y los cantantes, gente de la misma ralea, que guardamos mas en la recocina de la memoria las cosas no hechas, las cosas no dichas.... Lo que no hicimos ocupa mas lugar y pesa mas, es como las tareas pendientes atrasadas, lastran el paso, te quitan ligereza al caminar...En la vida, dicen los sabios Zen, hay que arder como un buena hoguera...No digo yo que eso hago. Digo yo que eso debe hacerse¡¡¡
ResponderEliminarun día tendré que llamar a las tres (Marimar, Eva y Cris) y así os conocéis... no tenéis curiosidad??? Por cierto vivís las tres muy muy cerca
ResponderEliminarJose, para qué me he puesto yo un seudónimo, eh? ;) Venga sí, quedamos un día y nos tomamos un mojito palmero por el barrio.
ResponderEliminarAnónimo, es verdad. Ser hoguera. Me lo apunto como propósito de esta semana...
jo, con lo bueno que soy guardando secretos y pongo todos vuestros nombres, ayyyyy no tengo perdón
ResponderEliminarToc, toc.
ResponderEliminarSe puede pasar?
Que hace días que te leo a ratos y me gusta lo que escribes.
Por eso , te llamo.
Salud!
Ada, pasa, pasa sin llamar. Este blog es muy de andar por casa, así que entra cuando quieras. Me gusta mucho lo que cuentas, también yo voy entrando por "tu casa". Me encantó la historia de tu abrigo de retales. Bueno, pues eso, ahí nos vemos!
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